1.- La Mutualidad ha recurrido a esta Superintendencia, reclamando en contra de una Isapre, ya que rechazó las licencias médicas otorgadas a una trabajadora, porque estimó que derivan de un siniestro que debe ser calificado como un accidente del trabajo en el trayecto, hecho ocurrido a las 14,00 hrs. del día de 15 de septiembre de 2017, mientras conducía su automóvil entre su habitación y su lugar de trabajo. Indica que la interesada pasó previamente al domicilio de una compañera de trabajo y cuando caminaba hacia la conserjería del recinto, sufrió la inversión forzada de su pie izquierdo, siendo trasladada de urgencia a la Clínica Alemana, lo que - a su juicio - implica una interrupción voluntaria del recorrido para realizar una actividad particular, por lo que estima que no corresponde en este caso otorgar la cobertura de la Ley Nº 16.744.
Requerida la Isapre, informó que en la especie la trabajadora denunció el siniestro de que se trata, ocurrido durante su horario de colación y a raíz del cual sufrió un esguince en su pie izquierdo.
Entre los antecedentes acompañados, se incluye documento denominado Relato Accidente de Trayecto, en el que se consigna el horario de trabajo de 16,00 a 20,00 hrs. También se incluye el siguiente relato de la interesada: "Salgo de mi casa en auto hacia Vitacura para dejar mi auto e irme en otro a empresa Pedro Fontova, llegó al estacionamiento exterior del edificio de una compañera ahí me bajo, iba caminando y me doblo el pie izquierdo, ahí me ayudan me suben al auto de mi compañera y me llevan a Huechuraba a la empresa donde había un almuerzo de empresa, ahí aviso y luego de un rato me llevan a la Clínica para atención en la Clínica al control de la semana me diagnostican fractura...". Consigna la trabajadora en su relato que "Ese día la empresa sólo iba a tener el almuerzo, la oficina estaba cerrada.".
2.- Sobre el particular, este Organismo debe expresar que el inciso segundo del artículo 5° de la Ley Nº 16.744 dispone que son también accidentes del trabajo aquellos que ocurren en el trayecto directo de ida o de regreso entre la habitación y el lugar de trabajo.
Ahora bien, de acuerdo con la jurisprudencia vigente de este Servicio, cuando la interrupción del trayecto responde a hábitos normales y/ o necesidades reales, no existe impedimento en calificar a un siniestro como del trayecto, puesto que se considera que en tales casos, ello no alcanza a romper el nexo que se supone existe entre el trayecto y el trabajo que realiza el trabajador.
En la situación en análisis, de los antecedentes proporcionados aparece que la afectada detuvo su desplazamiento para dejar su automóvil en el domicilio de una compañera de trabajo y a fin de trasladarse en otro vehículo hasta su lugar de trabajo, donde tendría lugar un almuerzo de celebración. Es decir, en la especie resulta indudable que, al momento de accidentarse, la conducta de la víctima estuvo determinada por la circunstancia de concurrir a su lugar de trabajo y que tan pronto cambiara de vehículo en el domicilio de su compañera de labores, reanudaría el recorrido junto a ella. Por tal razón, se estima que la conducta de la trabajadora no constituye una interrupción del trayecto.
3.- En consecuencia, esta Superintendencia declara que en la especie procede calificar el siniestro de que se trata como un accidente del trabajo en el trayecto y que, por ende, debe otorgarse a la trabajadora la correspondiente cobertura de la Ley N° 16.744.